Hoy, 20 de noviembre, Naciones Unidas celebra el Día Universal del Niño, una conmemoración a la que nos unimos todos, también desde este blog, para recordar los derechos de los más pequeños. Estos días mundiales nos sirven de parón para decir una vez más que los niños tienen derecho a la salud, a la educación y a la protección, independientemente del lugar donde hayan nacido; para hacer un llamamiento mundial sobre las necesidades de los más pequeños y para reconocer el esfuerzo de las personas que cada día trabajan para que estos niños tengan un futuro mejor.
Fue un 20 de noviembre cuando países de todo el mundo aprobaron la Convención sobre los Derechos del Niño, en 1989 y, a partir de entonces, esta fecha está dedicada a los niños y niñas del mundo. UNICEF, organización internacional que se encarga de proteger los derechos de la infancia, nos aconseja aprovechar este día para conocer las distintas formas de colaborar con aquellas organizaciones que trabajan para proteger los derechos de los niños más vulnerables.
Al hilo de esta celebración y para sacar la sonrisa a los más pequeños de la casa, hemos preguntado a Amanda y Javier, padres de dos niños, algunas de las recetas más divertidas que hacen con sus hijos, para que todos cojamos ideas.
Recetas fáciles de hacer con niños
Hola, nuestros hijos no es que sean muy comedores y eso ha hecho que potenciemos nuestra creatividad en la cocina, la verdad. Aquella frase de que la comida tiene que entrar por los ojos se cumple con los niños casi al cien por cien. ¡Al menos con los nuestros! No siempre tenemos tiempo de hacer platos tan elaborados, pero intentamos ponerles distintos colores y decorarlos para despertar el apetito a los dos chiquitines.
Éste es uno de los platos que solemos hacer, porque, además de vistoso, es muy nutritivo y fácil de hacer.
Sobre una rebanada de pan bimbo colocamos una tortilla francesa y empezamos a montar la figurita del conejo. Para hacerlo, lo más fácil es cortar filetes redondos de jamón, choped o pechuga de pavo de los paquetes que ya tienen esa forma. Necesitamos dos círculos más o menos del mismo tamaño para cabeza y cuerpo. Para las patitas recortamos dos círculos con un cortador de galletas o con una tijera y los hacemos más pequeños.
Una vez que ya tenemos la forma del conejo lo decoramos con una rodaja de huevo duro, a modo de tripita. Para hacer la cara del conejo, hemos utilizado tacos de queso, que hemos recortado con la forma del hocico y los ojos. Añadimos unos trocitos de aceitunas negras para terminar de decorarlos. Los bigotitos podemos hacerlos con las ramitas verdes de la zanahoria. ¡Y ya tenemos una cena muy nutritiva, pero sobre todo muy divertida!
El segundo plato se nos ocurrió después de ver la película ‘Brave’ de Disney. A nuestra hija pequeña le encantaba la melena rizada y alborotada de la protagonista y pensamos hacer un plato que nos recordara a ella. Y la verdad es que es facilísimo de hacer.
Tan sólo tenemos que freír una hamburguesa en una plancha, que se convertirá en la cara de una niña traviesa. Sobre ella colocamos dos rodajas de huevo duro con aceitunas negras para hacer los ojos; una tira de pimiento para la sonrisa y el pepino para las orejas.
Para la cabellera rizada, utilizamos pasta en forma de hélice o tornillos y los colocamos encima de la hamburguesa. Si queremos decorarla todavía más, siempre podemos ponerle un cuello con unas hojas de lechuga y un lacito con pimiento rojo.
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