Nuestro calendario está lleno de fiestas locales. Son las más esperadas, por ser las más cercanas y las que se viven con mayor entusiasmo. Cada una tiene sus tradiciones, costumbres y, por supuesto, su indumentaria.
Los trajes regionales por su gran valor requieren un cuidado especial, aunque sólo los luzcamos una vez al año. Uno de esos días es el 12 de octubre, Día de la Hispanidad, festividad de la Virgen del Pilar.
Es un día festivo en España y en otros países de Latinoamerica. Y son muchos los que salen a la calle ataviados como lo hacían nuestros abuelos y bisabuelos, especialmente en Zaragoza donde se celebra la Ofrenda de Flores, uno de los actos más multitudinarios de las Fiestas del Pilar.
Hay muchos trajes tradicionales –baturro, flamenco, jotero, chulapa…-, tantos como regiones españolas. Todos son distintos, pero hay prendas que se repiten y son comunes a muchos de ellos.
Bordados: los bordados con color son una nota característica de los trajes tradicionales españoles. Hay voces que apuntan que es una influencia de la cultura árabe.
Chaleco: el chaleco forma parte del traje tradicional masculino. Es una chaqueta sin mangas, que va a la altura de la cintura. Suelen tener también bordados y los encontramos tanto oscuros como con colores estampados.
Mantón: es una de las prendas más tradicionales, utilizada por las mujeres a lo largo de la historia, retratadas con mantones en pinturas, cuadros, esculturas… Se ha mantenido en la vestimenta tradicional, aunque más corto y ribeteado por flecos. El bordado con motivos florales es una de las características de los mantones más alegres, aunque los hay también de lana para los días más fríos.
Mantilla: la mantilla es una de las piezas tradicionales que todavía podemos ver en la actualidad. Especialmente, en eventos como bodas donde algunas madrinas todavía la lucen con una peineta.
Pero hay muchos más. Están hechos con tejidos de algodón, lino, seda… A la hora de plancharlos debemos tener un cuidado especial. Algunas son prendas más delicadas, como los mantones con bordados, y otras, por su volumen, son más costosas de planchar, como es el caso de las faldas regionales.
En este post vamos a mostrarte cómo planchar algunas prendas del traje de baturra, ya que el 12 de octubre está a la vuelta de la esquina y muchos son los que preparan estos días su indumentaria más tradicional.
Falda tradicional
La saya o falda exterior es quizá la prenda más costosa de planchar, por la cantidad de tela que lleva. Su volumen hace que tengamos que dedicarle más tiempo. Estas faldas, además, tienen tablas y pliegues que salen desde la cintura, lo que complica todavía más el planchado.
Por eso, para no desesperar antes de tiempo, es mejor plancharla con un centro de planchado potente. Funcionan con más presión, lo que hace que el vapor penetre mejor en los tejidos y eliminemos las arrugas en menos tiempo y con menos esfuerzo.
En primer lugar planchamos la parte de arriba de la falda, de dónde salen los pliegues. Después colocamos la falda, de tal forma que la plancha quede en el hueco de la tabla, para ir girando la prenda conforme la planchamos.
A partir de ahí, vamos planchando pliegue a pliegue con mucho vapor y temperatura alta, ya que son tejidos gruesos que soportan bien el calor.
Chaleco:
El chaleco es una prenda que no suele arrugarse con facilidad, por lo que su planchado es mucho más fácil. Ponemos sobre la tabla y pasamos la plancha con decisión. Si es de un color negro, algo que suele ser habitual en muchos chalecos, podemos utilizar un trapo húmedo para evitar brillos. ¿Cómo lo hacemos?
Colocamos un paño blanco de algodón o lino humedecido encima de la prenda para evitar que la base de la plancha entre en contacto directo con el chaleco y planchamos a temperatura media.
Colocamos un paño blanco de algodón o lino humedecido encima de la prenda para evitar que la base de la plancha entre en contacto directo con el chaleco y planchamos a temperatura media.
Y, si la prenda no está muy arrugada, podemos usar la fuerza del vapor, colgándola en una percha y dirigiendo los golpes de vapor hacia las arrugas. De esta forma, se eliminan las arrugas sin necesidad de que el metal caliente de la base toque el tejido oscuro. Otra opción es planchar la prenda por el revés.
Pantalón de terciopelo
El terciopelo es un tejido con muchas fibras, por lo que el vapor va a ser de gran ayuda a la hora de plancharlo. Podemos utilizar golpes de vapor, manteniendo la plancha a unos centímetros del tejido. Después, pasamos la plancha a temperatura media.
Mantón
Lo primero que tenemos que planchar del mantón son los flecos. Suelen enredarse si no los hemos guardado con cuidado –incluso si lo hemos hecho- y desenredarlos lleva su tiempo. Sobre la tabla de la plancha colocamos los flecos y pasamos la plancha a temperatura alta y con vapor. Al mismo tiempo, estiramos el enredado del mantón, nunca de la tela. Y repetimos la operación con distintas secciones de flecos. Después, planchamos la zona central del mantón por el reverso del bordado.
Estas son algunas de las prendas del traje de baturro, que se completa con la enagua, el pañuelo, los complementos, el calzado… ¡y por supuesto el cachirulo!
Esperamos que te hayan servido estos consejos. ¿Te vistes con traje tradicional? Cuéntanoslo 🙂