¿Se te resisten las arrugas y te encanta llevar camisas? Aquí te contamos cómo plancharlas y los pasos que tienes que seguir para que queden perfectas.
Queremos que planchar una camisa sea una tarea relajada y cómoda, que podamos hacer fácilmente siguiendo unos sencillos pasos. Para ello, no hay mejor consejo que seguir las instrucciones de aquellos que saben planchar una camisa a la perfección. Sólo tenemos que seguir sus pasos y un poco de entrenamiento, para hacerlo igual de bien. Por ello, en esta ocasión, hemos preguntado a María, experta en planchado y tintorería, cómo planchar camisas. Nos lo enseña en este vídeo.
Planchar una camisa es mucho más fácil de lo que se piensa habitualmente. Tan sólo hay que seguir unos sencillos pasos y tener una tabla de planchar para alejar las arrugas a kilómetros de distancia de nuestra camisa. El modelo de plancha ayuda mucho. Hay algunas más potentes que otras y eso se nota a la hora de planchar. Con unas obtendremos el planchado en menos tiempo, mientras que con otras necesitaremos dedicarle un poquito más, pero en cualquier caso lo conseguiremos igual.
¿Qué necesitamos?
– Una tabla de planchar
– Una plancha de vapor o un centro de planchado
– Unos dedales o cucharillas
¿Cómo planchar una camisa?
1. Lateral de la camisa: Siempre empiezo por esta zona, porque es la que menos me cuesta. Antes de pasar la plancha, es muy importante comprobar que la base de la plancha está totalmente limpia para evitar manchas. Una vez que lo he comprobado, coloco bien la camisa sobre la tabla y aliso la tela con las manos. Después, voy pasando la plancha cuidadosamente y repito este paso con el segundo lateral.
2. Espalda y hombros: Una vez que tenemos los laterales de la camisa planchados, vamos a por la espalda. Para plancharla bien, la divido en tres partes y voy desplazando la camisa por la tabla para pasar la plancha por toda la zona. Termino y empiezo con los hombros. Ésta es una de las partes más complicadas de la camisa, junto a las mangas. Aquí la tabla nos va a ser de gran ayuda. Coloco el hombro en la parte redondeada de la tabla y paso la plancha hasta que quede sin arrugas.
5. Solapas: Este paso es muy sencillo, tan sólo tengo que pasar la plancha por la tela que hay entre los botones de la camisa. Para evitar que se quemen o se derritan, puedo colocar un dedal o una cuchara de café para taparlos y pasar la plancha sin problemas. Las planchas con ranura salvabotones como ésta también ayudan a que no se dañen.
6. Puños: Ahora ha llegado el momento de planchar la parte más complicada de la camisa, las mangas. Pero empezaremos por lo más sencillo, los puños. En esta zona de la camisa puedo hacer más presión con la plancha, porque el tejido está más reforzado.
7. Mangas: Para planchar el inicio de la manga, colocaremos con las manos los pliegues más cercanos al puño y alisamos.
8. ¡Y seguimos con la manga! Para evitar que se marque la raya, tan sólo tenemos que girar la camisa y pasar la plancha por la marca.
9. Cuello: Y me he dejado para el final la parte más sencilla. Tan sólo tengo que colocar el cuello totalmente extendido sobre la tabla y planchar.
Otra opción para dejar nuestra camisa perfecta y que requiere menos práctica es el centro de planchado vertical. Ya lo utilizamos para planchar vestidos de fiesta, pero podemos utilizarlo también para planchar fácilmente una camisa. Tan sólo tenemos que colocar la camisa en la percha del centro de planchado vertical, con regulación de altura, y repasar la prenda con vapor.
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