En ufesa nos gusta mucho el verano. No sólo porque sea tiempo de disfrutar de los días de sol y playa; de las noches con amigos; de paseos por la montaña… Sino porque tenemos mucho más tiempo, para dedicarlo a lo que no hemos podido hacer durante el resto del año. Probablemente, cada uno de nosotros tenemos una particular lista de tareas que vamos relegando por falta de tiempo. «Esto, para cuando tenga más tiempo….», solemos decir.
Pues bien, para nuestra ‘bloguera’ invitada hacer postres caseros es una de ellas. Por fin, a mitad de julio, ha conseguido sacar ese hueco para aprender a hacer una de las tartas fáciles de hacer más colorida y con sabor internacional con la batidora de repostería.
¿Quieres conocerla?
Allá va….
Hola a tod@s
No querría empezar este post sin antes decir que este postre casero se lo debo a mi buena amiga Halyna. Es ucraniana, de Liev, una ciudad de Ucrania, de 700.000 habitantes situada al noroeste del país, muy cerca de Polonia.
Es verdad que allí las temperaturas en verano no son tan elevadas como aquí -la pobre lleva fatal los 40 grados de la última ola de calor y ¿quién no?- , pero tampoco se quedan muy atrás. Para esos días veraniegos, suele hacer un postre casero muy refrescante, con mucho color : una tarta fácil de hacer que no necesita horneado, sólo una batidora de repostería y un frigorífico.
A ella le sale deliciosa, así que ahora que tengo un poquito más de tiempo he seguido «a pies juntillas» sus pasos y éste es el resultado. Sólo falta probarla, espero que me haya salido al menos igual de bien que a ella.
Los ingredientes que necesitamos son:
Y aquí, paso a paso para una tarta fácil de hacer y, además, sin horno.
Etiquetas:postres fáciles