En este post, hemos invitado a Marta, periodista y mamá de un bebé precioso, para que nos cuente un consejo para hacer las papillas de frutas: añadir leche. Si tu pequeño rechaza la leche después de las frutas, porque ya tiene suficiente, puedes añadirla a la papilla de frutas y hacer la merienda todavía más nutritiva.
Hola,
Si sois padres, sabréis que en la vida de estos pequeños que tanto queremos hay fechas muy señaladas, destacadas incluso en el calendario pediátrico, que hacen una ilusión enorme. Los «seis meses» es una de ellas y no es para menos… ¡han llegado a la mitad del primer año de vida!
Con los seis meses, llegan también nuevos gestos, nuevos movimientos, nuevos balbuceos y también nuevos hábitos de alimentación. Sí, por fin, ha llegado el momento de introducir nuevos alimentos, más allá de la leche.
Por norma general, aunque dependerá de las instrucciones de cada pediatra, los lactantes se alimentan de leche hasta los seis meses y es entonces cuando se aconseja introducir los cereales y las frutas, de forma progresiva.
Durante la primera semana de octubre, se ha celebrado en España la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que este año se ha enfocado a la madre trabajadora. La Asociación Española de Pediatría ha aprovechado la cita para recomendar una vez más esta práctica, al menos hasta los seis meses de edad. Pero llegado a esta edad y después de la leche, el primer alimento que suelen tomar los bebés, junto a los cereales, son las frutas por su fácil digestión y por los nutrientes, vitaminas y fibras que aportan.
¿Cómo las hago?
Os voy a contar un consejo que me dio mi pediatra y que funciona de maravilla. Es muy sencillo, tan sólo se trata de añadir leche a las frutas. La verdad es que me sorprendió cuando me lo dijo, ya que hasta el momento había escuchado que la fruta y la leche no combinan bien, pero en absoluto es así. De hecho, es recomendable ofrecer al pequeño leche después de la fruta, pero en el caso de que no la quiera, como me ocurría a mi, la pediatra me aconsejó que echara dos o tres cacitos de leche en la papilla. De esta forma, el bebé recibe una alimentación muy completa a la hora de la merienda.
La pera, el plátano y la manzana son las primeras frutas que el bebé toma. Son las más digestivas y las que menos alergias producen. Otras, como la fresa y el melocotón, deben guardarse para más adelante, cuando el pequeño tiene al menos un año de edad, e introducirlas progresivamente.
– 1/2 pera
-1/2 plátano
– 1/2 manzana
– Una galleta maría o cereales
– zumo de naranja
– dos cacitos de leche.
En el mercado, podemos encontrar muchos papillas de frutas ya elaboradas, que nos sacan de un apuro en el caso de que no podamos hacerlas en un momento dado. No obstante, ya sabemos que es aconsejable hacerlas en casa. Nuestros pequeños necesitan mucha energía para comenzar a moverse, gatear, andar…
Para aquellas tardes que no estemos en casa podemos simplemente hacerlas antes de salir de casa y transportarlas en un tupper cerrado. Hay batidoras de vaso muy cómodas para estos casos, porque el mismo vaso mezclador se convierte en un recipiente hermético perfecto para llevar la merienda allá donde vayamos. Sustituimos el módulo de la cuchilla por una tapa hermética con boquilla y, sin manchar otro recipiente, nos llevamos la papilla de fruta cómodamente.
Prepara la papilla de frutas sin cambiar de recipiente.
Con las cuchillas de la batidora, podemos batir alimentos y también picar hielo.
Cambiamos la cuchilla por un cierre hermético.
Y la metemos al bolso para llevarnos la merienda al parque, al cole…
¡Cuéntanos cómo haces la papilla de frutas y si tienes trucos como éste!
