La nochevieja es mágica. En teoría solo es una noche más que marca el paso de un día a otro, y somos nosotros quienes le damos ese valor especial. Pero de alguna forma reina una atmósfera distinta, un clima de anticipación, que advierte de todo lo que está por llegar con el nuevo año.
No, no es una noche más, es especial. Y en una noche especial queremos estar deslumbrantes y llevar un vestido que nos defina. Hoy te contamos algunos consejos para planchar tu vestido de nochevieja, prestando atención a cada tejido, para que quede perfecto para la fiesta.
Es importante que ajustes la temperatura adecuada para cada prenda, ya que no es lo mismo planchar un vaquero que una blusa de seda o de lino. Acuérdate de mirar la etiqueta de la ropa, pues es la que muchas veces te indica cómo planchar una prenda específica.
Cómo planchar vestidos de seda, terciopelo o encaje
Para planchar un vestido o blusa de seda lo mejor es emplear la fuerza del vapor. Regula la temperatura de tu plancha al mínimo y da la vuelta a la prenda para plancharla. También podemos colocar un paño blanco sobre ella, para evitar dañarla si el tejido es muy delicado. Después, la colgamos en una percha y, si te vas a poner la prenda en ese momento, espera unos minutos antes de hacerlo.
El terciopelo es otro tipo de tejido frecuente en las fiestas de nochevieja. Es tan suave que da miedo estropearlo y da la sensación de que si lo lavas o lo tocas mucho se romperá. Para que el terciopelo tenga un acabado perfecto sigue las mismas indicaciones que con la seda: plancha el vestido del revés y selecciona la temperatura mínima, aprovechando al máximo el vapor.
El vapor proporciona rapidez y hace más fácil el planchado, lo que viene genial cuando se trata de tejidos que se arrugan con facilidad. Si planchas la prenda de terciopelo del revés evitarás que se arruine su textura y tu prenda seguirá siendo tan suave como el primer día.
En cuanto a los vestidos de encaje, no tengas miedo de usar la plancha. Tanto si se trata de ropa interior o de pequeños detalles en una blusa, chaqueta o vestido solo tienes que tener cuidado, sobre todo si hay algún hilo suelto, pero puedes pasar la plancha perfectamente, siguiendo las mismas indicaciones que para los tejidos de seda.
Un fallo común es plegar la ropa después de plancharla. Reserva los estantes del armario para camisetas, pantalones y ropa menos delicada y cuelga todos tus vestidos y blusas para evitar que se arruguen.
Utiliza los golpes de vapor
Si el tejido de la prenda es muy delicado, utilizaremos mejor los golpes de vapor. Así evitaremos que la suela de la plancha entre en contacto con la prenda y aparezcan brillos. Para ello, colocamos el vestido en la tabla de planchar y aplicamos los golpes de vapor sobre la ropa.
Tanto si estrenas atuendo en Nochevieja, como si recurres a ese precioso vestido que ya te has puesto en alguna otra ocasión, sigue estos consejos y tus prendas seguirán igual de deslumbrantes después de esta noche mágica.
Desde Ufesa, te agradecemos un año más que hayas seguido y comentado los posts que a lo largo de este 2017 hemos publicado en este blog. ¡Ha sido un placer hablar de pequenos electrodomésticos contigo!
