Si hay un plato que ha cambiado en las últimas décadas, ése es la ensalada. La clásica elaboración a base de tomate, lechuga y aceitunas, aunque deliciosa, ha dado a paso a otras recetas. En la carta de los restaurantes podemos encontrar una gran variedad de ensaladas, cada cual más original.
El secreto está en combinar ingredientes de todo tipo. Dulces, salados, amargos, ácidos… y aliñarla con una vinagreta o salsa adecuada. Sólo tenemos que encontrar la combinación que más nos guste para las ensaladas de verano.
En casa, también podemos repetir y disfrutar de estas deliciosas ensaladas. Te proponemos tres recetas, para que disfrutes de este plato tan veraniego. Nos ayuda a combatir el calor en los días de verano y es fuente de vitaminas y minerales.
Ensaladas de verano: ensalada de melocotón y queso fresco
Incorporar las frutas a nuestras ensaladas es un pequeño gran acierto. Aportan color y una textura diferente, original, a nuestro plato. Además, el sabor dulzón de la fruta combina a la perfección con el amargo del vinagre.
En esta ocasión, hemos elegido el melocotón; lo hemos partido a trocitos y lo hemos cocinado en una sartén con un poquito de aceite de oliva.
A continuación, cortamos rodajas muy finas de manzana, a modo de carpaccio. Con un cortafiambres, podremos hacerlo fácilmente. El siguiente paso es cortar a daditos el queso fresco y espolvorear por encima un pelín de orégano.
En una fuente aparte colocamos la rúcula y la aliñamos antes de mezclarla con el resto de ingredientes. De esta forma, conseguiremos que el aceite y el vinagre llegue a todos los ingredientes y no se quede en la capa superior.
A continuación, añadimos el queso fresco, las rodajas de manzana y el melocotón asado. Volvemos a aliñar estos ingredientes en su justa medida, si pasarnos. ¡Y listo! Ya tenemos nuestra primera ensalada. Si te gustan, las ensaladas con frutas, descubre aquí más recetas.
Ensalada tibia de gulas y vieiras
Las ensaladas templadas son siempre una buena elección. Quedan riquísimas y son diferentes, ya que éste es un plato que suele comerse frío. De esta forma, le damos una vuelta de tuerca y nos sale una receta muy original.
Cocinamos las gulas en una sartén con un pelín de aceite de oliva y ajo. Lavamos las vieiras y las hacemos a la plancha. Ya tenemos listos los ingredientes principales.
Ahora sólo falta aliñar la rúcula y calentar 10 segundos en el microondas. Añadimos las vieiras y las gulas calientes. Y listo para servir y disfrutar de esta ensalada templada.
Ensalada de arroz a la vinagreta y pavo
Cocemos el arroz en una olla de agua hirviendo. Para ajustar las medidas, ponemos el doble de agua que de arroz. Es decir, dos medidas de agua por cada una de arroz. Después, una vez cocido, lo dejamos enfriar.
Añadimos trocitos de pavo y curtidos en vinagre al gusto: zanahoria rallada, pepinillos, cebolletas, aceitunas negras y/o verdes. Aliñamos con aceite de oliva y vinagreta. ¡Lista! Acabamos de hacer otra ensalada.
¿Con cuál te quedas? Nosotros, con las tres… 😉 ¡Comparte con nosotros tu ensalada de verano!
