Un truco que sí funciona para cortar y picar cebolla sin llorar

¿Qué sería de nuestros platos sin la cebolla? Es uno de los ingrediente estrella en la dieta mediterránea, capaz de darle un toque sabroso e inconfundible a nuestros platos.  Y podemos decir que ese buen sabor nos lo ganamos a pulso, cuando la cortamos en juliana, en daditos o en rodajas. ¡Nos cuesta nuestros buenos lagrimones! Esto es así porque este tubérculo tiene un sulfóxido de tiopropanal, que actúa como un auténtico gas lacrimógeno cuando se cortan las capas.

 Son muchos los trucos que hemos oído para cortar cebolla sin llorar, pero no siempre son tan efectivos como nos gustaría.  Y eso que son unos cuantos:

¿Has probado alguno de estos trucos? ¿Te han dado resultados? Es probable que en las respuestas haya de todo. Nosotros vamos a proponerte otro truco, mucho más cómodo y rápido de cortar cebolla, sin derramar ni una sola lágrima.

La solución es una picadora. La cebolla es una ingrediente que usamos prácticamente a diario, tanto en nuestras comidas como en nuestras cenas. La verdad es que este pequeño electrodoméstico nos ayuda mucho a ganar tiempo y a tener siempre cebolla preparada para cada receta, ya que podemos cortar varias cebollas y conservarlas en el frigorífico. Ocupa muy poco espacio en la cocina y es muy rápida. Tan sólo necesitamos tres segundos para picar una cebolla entera.

Cortamos la cebolla en cuatro trozos y los introducimos en la picadora.

¡Así quedaron!

Una forma de conservarlas en buen estado durante varios días, sin que pierda su frescura, es el interior de una bolsita de plástico con cierre hermético. Incluso las podemos congelar ya cortada en pequeñas bolsitas y utilizarlas en los guisos más adelante. Eso sí, en este caso, debemos añadirlas a la sartén o cacerola tal y como salen del congelador, sin esperar a que se descongelen.