Las frutas de verano llegan siempre en grandes cantidades. Y no nos importa, en absoluto, porque están deliciosas y tienen una gran acogida entre los consumidores. Su sabor dulce y refrescante hace que apetezcan a todas horas y se utilicen para hacer zumos, batidos y hasta como un ingrediente más en las ensaladas.
¿Quieres disfrutar de ellas todo el año? Puedes hacerlo, si las conservamos debidamente.
La deshidratación de los alimentos ha sido a lo largo de la historia uno de los métodos más utilizados para conservar los alimentos. Con el deshidratador de Ufesa, podemos conservar la fruta de verano –melocotón, albaricoque, nectarina- y convertirlas en unos energéticos ‘snacks’, perfectos para hacer deporte.
Otra forma dulce de disfrutar de las frutas de verano es hacer unas deliciosas mermeladas. Podemos hacerlo a la antigua usanza como la hacían nuestros abuelos o con la panificadora si tenemos menos tiempo. Pocos conocen esta función, pero con la panificadora podemos hacer también mermeladas, además de pan casero y artesano.
La recomendación es utilizar la misma cantidad de fruta y azúcar, para conseguir una mermelada consistente y brillante. Eso sí, el peso de la fruta que hay que tener en cuenta para hacer este cálculo es el de la fruta que vamos a utilizar, es decir sin piel, ni semillas, ni hueso en el caso del albaricoque y el melocotón.
Mermelada de melocotón y menta
El sabor del melocotón combina a la perfección con la menta, así que en esta ocasión hemos decidido ponerlos en el mismo tarro y hacer una mermelada muy original. La ventaja de hacer nuestros productos en casa es que podemos hacerlos diferentes y únicos mezclando, además, los sabores que más nos gustan.
¿Qué ingredientes necesitamos?
- 400 gramos de melocotón
- 300 gramos de azúcar
- Zumo de medio limón
- Una hoja de menta
- Dos cucharadas de agua fría
¿Cómo la hacemos?
- En esta ocasión, vamos a hacer la mermelada casera de una forma muy cómoda con la panificadora. Tan sólo tendremos que prepara los ingredientes y pelar los melocotones.
- A continuación, cortamos los melocotones a trocitos pequeños. También, podemos pasarlos por la batidora unos segundos para que queden más desechos y la mermelada quede más homogénea.
- El siguiente paso es añadir los melocotones a la cubeta de la panificadora y agregar el resto de ingredientes, es decir, el zumo de limón, el azúcar y la hoja de menta al gusto.
- Ahora tan sólo tendremos que seleccionar el programa nueve de la panificadora para hacer la mermelada y en menos de dos horas tendremos nuestra mermelada preparada.
- Antes de colocar la mermelada en botes, tendremos que haberlos limpiado y esterilizado convenientemente, para evitar posibles contaminaciones.
- Hemos terminado de hacer nuestra mermelada casera, pero ahora viene quizá el paso más importante: asegurarnos de su perfecta conservación.
- Con la mermelada muy caliente –esto es importante- rellenamos los botes dejando tan sólo unos milímetros de espacio y cerramos el envase.
- A continuación, esterilizamos los botes con la mermelada dentro al baño maría, durante unos diez minutos. El conservante de la mermelada es el azúcar, por eso, si la has elaborado con azúcar, una vez que los botes se han enfriado puedes guardarlos en la despensa en un sitio fresco, oscuro y libre de olores. Si la has elaborado con muy poca o nada de azúcar, es mejor guardar los frascos ya fríos en el frigorífico.
¡Y ya tenemos una rica mermelada con un toque de menta, perfecta para desayunar! Podemos hacer mermelada casera de higos, ciruelas, paraguayo…Otra opción, más cómoda que las anteriores, es congelar la mermelada. Así no tendremos que hervir los botes con la mermelada dentro.