Si has paseado por las calles de Madrid, es probable que hayas probado uno de estos barquillos, que cuentan con años de tradición en la capital española. Es uno de los postres típicos de la fiesta de San Isidro, patrón de Madrid, que se celebra el 15 de mayo.
Aunque cada vez son menos frecuentes, todavía podemos ver a algún barquillero castizo, vestido de chulapo, vendiendo barquillos al grito de “Al rico barquillo de canela para el nene y la nena, son coco y valen poco, son de menta y alimenta, de vainilla qué maravilla. ¡Y de limón, qué ricos, qué ricos, qué ricos que son!
“Al rico barquillo de canela para el nene y la nena, son coco y valen poco, son de menta y alimenta, de vainilla qué maravilla. ¡Y de limón, qué ricos, qué ricos, qué ricos que son!»
Como es verdad que están tan ricos como dice el dicho, y San Isidro está a la vuelta de la esquina, hemos pensado que sería una buena idea aprender a hacerlos en casa. ¿Te animas?
¿Qué necesitamos?
- 3 claras de huevo
- 100 gramos de azúcar
- 100 gramos de harina
- 100 gramos de mantequilla derretida
- Esencia de vainilla
¿Cómo hacer barquillos?
- Mezclamos las claras de huevo con el azúcar.
- A continuación, añadimos la harina tamizada y, después, la mantequilla derretida.
- Batimos hasta tener una mezcla. Con una batidora de repostería, conseguiremos una mezcla más homogénea, con menos tiempo y menos esfuerzo.
- En un grill con tapa, vertemos un poco de mezcla, bajamos la tapa y dejamos calentar durante unos minutos.
- Para poder despegar la masa sin problema, debemos engrasar antes con mantequilla la superficie.
- Sacamos los barquillos y, con la ayuda de una superficie cilíndrica, los enrollamos para formar los barquillos. Finalmente, los dejamos enfriar para que queden crujientes.
Con esta masa también podemos hacer tulipas artesanas:
- En una bandeja con papel de horno, colocamos la mezcla en forma de círculos y las calentamos a 150ºC. No te alejes del horno, porque, en cuanto se empiecen a dorar… ¡tenemos que sacarlas rápidamente!
- Las sacamos cuando todavía están blanditas, para poder hacer la forma.
- ¿Cómo la hacemos? ¡Muy fácil! Prepara cuatro o cinco vasos y dales la vuelta. A continuación, coge la tulipa, colócala sobre el vaso y presiónala con una servilleta –para no quemarnos-, hasta que coja la forma de la base del vaso.
¡Por último… sólo nos queda felicitar a todos los madrileños este San Isidro Labrador! Una fiesta que se alarga durante varios días, en los que las romerías y verbenas se suceden y donde es tradición ponerse el traje regional e ir a la Pradera de San Isidro y a las Vistillas para celebrarlo en compañía.